Blockchain o cadena de bloques, es considerada una de las herramientas más disruptivas del momento. Un concepto que plantea una nueva revolución en todo tipo de ámbitos.
La idea nace entorno al año 2008 y con su uso, se propone un nuevo modelo de autentificación, en la que ninguna transferencia de valor se realice a través de intermediarios, sino a una red de nodos u ordenadores conectados a la red, consiguiendo con transparencia la recopilación de información veraz y autentica.
Se realizan transacciones, registrados como “bloques de datos”, los cuales están conectados y forman una sucesión irreversible. En definitiva, se trata de una base de datos o registro digital que almacena información en forma de cadena de bloques distribuida entre muchos nodos, consiguiendo mayor seguridad, gracias a su cifrado criptográfico.
TIPOS DE REDES
- Redes públicas: una red descentralizada, en la que cualquiera puede unirse y participar. Requiere de una gran potencia computacional y la seguridad es débil, ya que proporciona poca privacidad.
- Redes privadas: una red descentralizada entres pares, similar a la red pública. En este caso, el propietario es el encargado de la administración y el control de quien tiene permisos para acceder, la ejecución de los protocolos, y la realización del mantenimiento.
- Redes autorizadas: imponen restricciones referidas a la participación en la red y sus transacciones, a través de una invitación o permiso especial. Aunque las redes públicas pueden hacer uso de estas restricciones, son los propietarios de redes privadas, quienes generalmente harán uso de ellas.
- Consorcio: varias compañías comparten las responsabilidades de mantener un blockchain. Estas organizaciones deciden quién tiene acceso a las transacciones o al acceso de los datos.
BENEFICIOS Y VENTAJAS
- Confianza: blockchain aporta la seguridad de que los miembros de estas redes, sobre todo si son privadas, reciban datos precisos y oportunos.
- Seguridad: las transacciones de este sistema de cadenas son inalterables y permanentes. Se recomienda llegar a un consenso entre todos los miembros sobre la precisión. Además, su estructura en bloques, descentraliza los datos almacenados y hace que sea extremadamente difícil cualquier tipo de hackeo, falsificación o perdida de datos.
- Eficiencia: los tiempos de acción de conciliación de registro se eliminan y se permite acelerar las transacciones gracias a un conjunto de reglas conocido como “contrato inteligente”
- Velocidad: las transiciones son casi instantáneas al no necesitar, en ningún caso, intermediarios o verificación de terceros, pudiendo ahorrar tiempo y costos.
USOS
Solemos relacionar esta tecnología a las criptomoneda, pero como ya habíamos adelantado, esta tecnología va mucho más allá y es también muy utilizada en muchos otros ámbitos.
Quizás, uno de los usos más curiosos del Blockchain está ligado a la industria alimentaria y en el seguimiento de productos hasta la distribución final. Esta aplicación permite a los consumidores conocer de dónde provienen los alimentos, asegurando sostenibilidad y calidad.
La cadena de bloques también está muy presente en el sector energético, ya que posibilita la creación de redes entre distintos hogares para la compra y venta de excedente de energía producida. Hay diversos proyectos dedicados al intercambio de energía renovable y transacciones de electricidad y gas, gracias a la habilitación de transacciones económicas exclusivas de la red.
Gracias a las numerosas criptodivisas que se mueven ahora mismo en el mercado, algunas entidades bancarias tienen la posibilidad de hacer transacciones seguras, transparentes, rápidas y eficientes, sin necesidad de intermediarios.
Además, también ha aportado grandes oportunidades a otros sectores como la logística, el comercio, sector inmobiliario, seguros o sanidad. Permitiendo identificar falsificaciones, aportando datos más certeros para investigaciones y previniendo propagación de enfermedades, optimizando privacidad, etc.
Sin duda, el blockchain es una tecnología que sustenta el funcionamiento de las criptomonedas, pero sus posibilidades son infinitas. Tiene un campo de acción enorme y la posibilidad de combinarse con otras tecnologías como el IOT, ocasionando grandes transformaciones en proyectos y negocios.
